Por qué las afirmaciones a veces no funcionan

Las afirmaciones son excelentes, siempre que se hagan con algunos recaudos

Imagen de Gerd Altmann en Pixabay

Todos nos cuentan que con las afirmaciones podemos llegar adonde queremos, la verdad es que es así, pero no todo es tan simple como pensamos, a menos de que seas un privilegiado de no tener ningún patrón mental que te permita no creer lo que estás afirmando.

Pongamos un par de ejemplos:

Una persona que vive en la calle en las peores condiciones, aunque se repita una y otra vez “vivo en una mansión de 20 millones de dólares”, a la noche no va a estar en una cómoda cama, solo va a tener el cobijo de las estrellas y conforme pasen los días, seguirá a la intemperie. En el terreno de los afectos, aunque me repita una y otra vez el hombre que duerme a mi lado es Brad Pitt, a la mañana voy a amanecer con la persona con la que convivo.

Las afirmaciones son excelentes, pero tienen que cumplir varios requisitos para ser eficientes:

  • Todos tenemos nuestro mapa mental, que muchas veces dista de la realidad, pero nuestro cerebro se maneja con él. Nuestro mapa mental es como percibimos nuestra realidad. Por ejemplo, si sos talentoso, pero vos no lo crees, ninguna afirmación va a poder ayudarte, entonces antes de las afirmaciones deberías trabajar en modificar tu mapa para poder verte como realmente sos.
  • Planteate qué es lo que querés lograr y que esté a tu alcance. ¿Un trabajo acorde a tus calificaciones de las cuales estás seguro? sí las afirmaciones en este caso ayudan. Ser millonario de un día para el otro, ahí no te van a servir las afirmaciones.
  • Aunque pienses que estás seguro de que algunas cosas son para vos, tenés que hacer un trabajo para que funcionen.

Después de evaluar la situación y ver que las cosas fundamentales están listas, prepará un cuaderno para trabajar con las afirmaciones. Pienso que funcionan mejor cuando las escribís ya que ponés toda tu atención en ella.

Por ejemplo, (supongamos que quiero bajar de peso, suposición acertada) el plan es el siguiente:

Empezar a comer sano, moverme un poco ya sea caminando, haciendo algún deporte o yendo al gimnasio, de esta manera le estoy informando a mi mente que estoy dispuesta a bajar de peso haciendo lo que corresponde.

Las afirmaciones SIEMPRE se hacen con el resultado en tiempo presente, por ejemplo, no sirve poner una afirmación que diga: “yo voy a bajar de peso y voy a llegar a los 60 kgs.”, (tachado porque es lo que nunca debés hacer). Una vez que armaste tu afirmación, tomás el cuaderno y lo dividís en dos: ¿para qué? Ahora te muestro un ejemplo de lo que va a pasar con mis afirmaciones porque no siempre ponemos primera y funciona:

EJEMPLOS RESPUESTAS DE MI MENTE
Yo, Pat merezco mantener mi peso perfecto de 60 kilos, coma lo que coma Yo no lo creo
Yo, Pat merezco mantener mi peso perfecto de 60 kilos, coma lo que coma Si fuera verdad sería muy fácil
Yo, Pat merezco mantener mi peso perfecto de 60 kilos, coma lo que coma Yo no me lo creo
Yo, Pat merezco mantener mi peso perfecto de 60 kilos, coma lo que coma No puede ser verdad

Insistimos varias veces hasta que nuestra mente se canse de burlarse de nuestra intención, mientras aparece el motivo real del por qué no podemos bajar de peso:

EJEMPLOS RESPUESTAS DE MI MENTE
Yo, Pat merezco mantener mi peso perfecto de 60 kilos, coma lo que coma Sería maravilloso, pero si bajo de peso… me van a lastimar, me voy a exponer, ¿de qué me preocuparía?
Yo, Pat merezco mantener mi peso perfecto de 60 kilos, coma lo que coma
Yo, Pat merezco mantener mi peso perfecto de 60 kilos, coma lo que coma Si, pero… cómo lo haría?
Yo, Pat merezco mantener mi peso perfecto de 60 kilos, coma lo que coma Puede ser…

Hasta que no aparezca el motivo real por el cual empezamos nuestro boicot para subir de peso, la afirmación no va a ayudar.

Una vez que apareció, podemos avanzar con nuestras afirmaciones. Es momento de poner el cartelito en la heladera, escribirlo en nuestra agenda y donde queremos recordarlo.

Antes de empezar, hay que prepararse de manera adecuada: ¿estás dispuesto a perder las compensaciones, las recompensas secretas que obtienes con tu exceso de peso? ¿Estás dispuesto a perder la atención de los demás? ¿estás dispuesto a abandonar tus miserias y ser libre? Si tu decisión es no a todas estas preguntas, comé sin culpas solo cuidando tu salud, porque no estás preparado para tener el cuerpo que merecés. A veces uno no sale de la zona de confort, aunque sea una prisión.  En definitiva, analizar la verdad del por qué de tu exceso de peso, si no tenés un motivo que requiera atención médica, buceá en tu interior para encontrar los motivos de lo que querés demostrar con tu exceso de peso.

Al encontrar la verdad, todo va a funcionar: la dieta, el ejercicio y las afirmaciones.

Liked this post? Follow this blog to get more. 

About Pat Sierra 37 Articles
Periodista en Ciencia y Tecnología. Autora, Life Coach. Amo vivir en la libertad de la palabra.

Be the first to comment

Leave a Reply