2021, comencemos con metas

Planificando metas desde el comienzo del año

Imagen de gabrielle_cc en Pixabay

¡Feliz 2021! Bueno, no pongan cara de ofuscados mientras me leen. Sé que el 2020 será un año inolvidable por las cosas desagradables que vivimos: pandemia, muerte de seres queridos, no solo familiares y amigos sino figuras que uno admiraba. Tuvimos que taparnos parte de la cara y vivir con sumo cuidado y angustia.

Siempre tenemos que intentar que nuestras metas sean buenas para todos

Se que vivir coqueteando con el miedo, no es lo mejor que nos puede pasar, pero tampoco es bueno que nos petrifiquemos ante esta pandemia.

Hay cosas que podemos hacer seguros en casa: leer, cocinar, hacer gimnasia, tocar un instrumento, cantar, coser, mirar TV películas y series, escuchar música, tener una participación más activa en redes sociales, si te gusta escribir es momento de abrirte un blog y mostrarle al mundo tu talento. Particularmente el 2020 hice cursos, siento que a pesar de esta incomodidad de no poder moverme libremente, pude aprovechar el año.

Hablemos de Metas

¿Sabías que existen las metas ecológicas?

No estoy hablando del medio ambiente del planeta, sino de las metas balanceadas, o sea son buenas para quien las proyecta y para su entorno.

Las metas pueden ser:

Buenas – Buenas: Positiva para quien la persigue y para su entorno. Por ejemplo: un jefe de familia que decide cambiar de empleo para mejorar su posición, o estudiar para poder ascender en su propio empleo. El resultado será bueno para quien encaró la meta y para su entorno, porque van a gozar de una mejora económica y la persona va a estar feliz en otro cargo.
Otro ejemplo más cotidiano, alguien que decide hacer una rica comida o un postre, todos en la familia van a disfrutar de ese momento.

Buenas – Malas: Todos conocemos alguna persona mala, que no le importa sacarle el puesto de trabajo con manipulaciones y artimañas a alguien, para ascender. Esa es una meta buena para quien se lo propone y mala para el resto, ya que esa persona que dejó sin trabajo la consecuencia también la sufre su familia. A veces no solo es cuestión de competitividad, muchas veces es maldad.

Malas – Buenas: ¿Quién no sabe de alguna madre que queda sin comer para darle a sus hijos? Esta acción es mala para ella y buena para sus hijos. No es correcto, lo ideal es que reparta el alimento o que busque una manera de que sea equitativo.

Malas – Malas: Acá presentamos a los villanos, esas personas que son tan malas que no les importa dañarse a sí mismos con tal de ver sufrir a otro.

Los cuatro tipos de metas, son éstos que te presento. Lo ideal es que tus metas sean buenas-buenas.

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